Siete amigos adentrados en las grutas del lugar "Gruta del Duende en Cuetzalan", admirando la naturaleza tanto de adentro como el área verde que lo rodea.

Gruta del duende

Explorar la belleza natural, en donde se dice que un duende cuida esta gruta; para bajar al interior de estas rocas solubles que revelan diferentes eras geológicas, cuenta con dos accesos acuáticos a los que se puede llegar a través del río subterráneo y desemboca en la cascada las “Brisas”. Existen dos formas de ingresar a estas grutas: por las escaleras y por rápel; el recorrido en esta gruta es bastante divertido, ya que puedes caminar entre pequeños caminos de piedra en la obscuridad con cascos que llevan luz para poder observar los detalles en el camino, ya que se debe tener cuidado al ser rocas, pero todo este recorrido es 100% seguro al ser guiado por un guía, dando equipo de seguridad necesarios, también es importante llevar ropa cómoda y tenis los cuales se puedan mojar.

Tres hombres; uno portando un traje que hace alusión a una águila y dos abajo de él con trajes típicos de Cuetzalan. Los tres hombres se encuentran en las alturas de un tipo poste de gran altura frente a la Iglesia de San Francisco de Asís.

Ceremonia ritual de “Los voladores”

La mejor experiencia de los visitantes es poder ver la ceremonia ritual de “los voladores” que consiste en una danza con hombres seleccionados y entrenados para esta clase de rituales. Esta actividad se realiza frente de la Iglesia de San Francisco de Asís, en donde se observa el gran tronco por el que suben los voladores y realizan la danza.

Se nota una calle de piedra, palmeras verdes, un kiosco con techo verde; cerca de este hay una torre de reloj de color blanco y rojo. Hay varias personas caminando. Al fondo se aprecia un edifico blanco y al lado la iglesia de San Francisco de Asís que tiene una torre alta.

Zócalo y casco histórico

Si no quieres gastar mucho, visita el Zócalo, el cual es su plaza principal, aquí es el punto perfecto para comenzar a recorrer las calles de este hermoso pueblo, encontrándote personas que venden artesanías, dulces, pulseras, sombreros, etc. También desde aquí podrás observar la Torre del Reloj, el Kiosco y las letras significativas “Cuetzalan”, en donde pueden sacarte fotos bonitas y pasar un grato momento con tus acompañantes.

Se observan algunas lápidas en ambos lados adelante de la Iglesia de los Jarritos, que predomina su gran altura y su color blanco con detalles rojos.

Iglesia de los Jarritos

Visita el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, cuya estructura se basa en jarras de barro que decoran la torre del campanario de la iglesia.

Se pueden observar construcciones antiguas altas de color blanco y muchas ventanas con tejados cafés, en ambas partes de la calle. Abajo en la imagen se aprecian algunas lonas que conforman los diferentes puestos del mercado callejero de Cuetzalan.

Mercado Callejero de Cuetzalan

A unos pocos pasos del Zócalo, se encuentra este fascinante tianguis que se colocan durante el fin de semana, pero si no es así, la calle en donde se colocan está repleto de lugares para comer, en donde existen una infinidad y uno pegado de otro, ofreciendo una gran variedad de lugares para desayunar, comer o cenar.